La Avenida de Mayo, situada en el barrio porteño de Monserrat,
fue el primer bulevar que tuvo la Ciudad de Buenos Aires,
Argentina y la columna vertebral del centro histórico y cívico de
dicha urbe.
Se convirtió en el grandioso escenario de la vida pública de
principios del siglo XX y los frentes de sus sofisticados edificios
de estilo art nouveau, neoclásico y ecléctico constituyeron el
magnífico marco de recepción de los ilustres visitantes extranjeros.
Es tal vez el mejor ejemplo urbano de la prosperidad de la Argentina
de principios del siglo XX: debajo de ella circula el primer
subterráneo (metro) que hubo en el Hemisferio Sur.
(Gracias Tomás Dorán)