En el antiguo Egipto, hace miles de años, el faraón Seti ordena
la muerte de todos los recién nacidos judíos. Una madre,
desesperada, coloca a su hijo en una cesta y la deposita en el
Nilo. Las aguas la conducen río abajo hasta la orilla donde la
hallará la reina. El niño era Moisés y fue educado como hermano
de Ramsés, el heredero del trono. Sin embargo, cuando, años
después, se descubra el origen hebreo de Moisés, los hermanos
se distanciarán.
(Gracias E de la Puente)