El fileteado nació en la ciudad de Buenos Aires, Argentina,
a principios del siglo XX como un sencillo ornamento para
embellecer carros de tracción animal que transportaban
alimentos y con el tiempo se transformó en un arte pictórico
propio de esa ciudad, hasta tal punto que pasó a convertirse
en el emblema iconográfico que mejor la representa. A fines
de 2015 fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la
Humanidad por la Unesco.
(Gracias MrGaucho)