Artistas, viajeros y escritores, desde Goethe hasta Ernest
Hemingway, se enamoraron de los lagos del norte de Italia.
Los Maggiore, Orta, Garda y Como, rodeados de cumbres nevadas y
villas espectaculares, son destino de veraneantes y viajeros
desde los tiempos de los romanos, todos en busca de descanso y,