Al sudoeste de Nueva Zelanda se encuentra una región llamada Te
Wahipounamu, que en maorí significa “Tierra de Jade”. Es una zona
caracterizada por sus frondosos bosques, sus 4 parques nacionales
y por alojar grandes símbolos de la fauna neozelandesa, como el
kiwi. Esta región remota aún mantiene el encanto de los bosques
antes de la llegada de los humanos y por ello es de tal belleza
que en el año 1990 fue convertida en Patrimonio de la Humanidad.
Los bosques de jade son otro bello rincón de nuestro planeta azul,