Ha llovido y hay charcos con ranas y sapos.
Llueve y no deja de llover.
Las ranas y los sapos en la noche, croan otra vez.
La luna los manda callar
pero ellos en sus charcas bailando están.
La luna sonríe, no quiere reñir
pero cuando ella sale tienen que dormir.
(Gracias E de la Puente)