Nuestro cine es en parte lo que es gracias a esas actrices y actores
que no tenían ningún problema en aceptar roles pequeños o en ser
comparsas de las estrellas de turno. Ellos siempre lo hacían bien y
siempre con modestia. Aquí hay un centenar de ellos o casi. No son
todos los que son pero sí que son todos los que están. La realeza