Allí está ella,
de pie frente a su reflejo.
Una muchacha que fui,
con el cabello suelto,
los ojos llenos de promesas,
y una sonrisa que no temía al mundo.

Allí está ella,
de pie frente a su reflejo.
Una muchacha que fui,
con el cabello suelto,
los ojos llenos de promesas,
y una sonrisa que no temía al mundo.