La Alcazaba de Badajoz es la más grande de Europa, se puede visitar y se debe si se quieren disfrutar atardeceres inolvidables. Recorrer su recinto, de 1.200 metros de lienzo de muralla y unas ocho hectáreas de superficie, es un viaje al pasado musulmán de la ciudad de Badajoz que fundó en el año 875 Ibn Marwan. Aunque la Alcazaba que hoy conocemos es el resultado de su evolución en la época almohade entre los siglos XII y XIII.