La Luna tiene una superficie sólida rocosa cuya característica más llamativa es la presencia de multitud de cráteres y cuencas. La Luna tiene algunos volcanes que no están activos desde hace millones de años.
La Luna tiene una superficie sólida rocosa cuya característica más llamativa es la presencia de multitud de cráteres y cuencas. La Luna tiene algunos volcanes que no están activos desde hace millones de años.